miércoles, 4 de noviembre de 2009

[¿] I.G.U.A.L.D.A.D [?]

Esta entrada la quiero dedicar a un caso que personalmente me ha llamado mucho la atención. Se trata de Miguel Ángel García Moreno, quien en diciembre de 2005 fue denunciado por violencia de género y condenado como tal a 4 años de prisión. Si soy sincera, no era conocedora de esta historia, pero a cualquiera que le llame la atención lo mismo que me ocurrió a mí no tendrá ningún problema en encontrar información del caso en cuestión, puesto que son muchas las movilizaciones de apoyo que ha recibido este hombre.



Miguel Ángel fue denunciado por su expareja por maltratos, con la que ya hacía seis meses que no mantenía relación. MAG había iniciado una relación sentimental con otra mujer cuando llegó el comunicado de esta denuncia. Al parecer, y he aquí lo inentendible (al menos bajo mi punto de vista, incluso perspectiva femenina) es que Miguel Ángel fue condenado únicamente basándose en el testimonio de la denunciante y sin ninguna prueba aparente. Algo, que bajo mi punto de vista, pensé que nunca podría ocurrir, ni siquiera en este país en el que muchas cosas van al revés de la lógica humana.



Por tanto, no es de extrañar que haya sido tal el revuelo formado, con eslóganes tan simples y claros como “Falsa Violencia de Género”.
Para mí, lo paradójico de la historia, y tras haber leído testimonios de apoyo de la madre, amigos, incluso de mujeres que verdaderamente han sufrido esta situación, es cómo una persona puede ser condenada a cuatro años de prisión basándose en un testimonio y un hombre que apuñaló a su ex mujer únicamente su pena sea de un año. ¿Tan excesivamente mal va la justicia española?
Probablemente me esté metiendo en camisas de once varas tratando un tema tan delicado como este, y únicamente habiendo leído una versión y la prensa que tocó este asunto, pero si esto fuese como se dice, me parecería realmente vergonzoso. Siento ante tal suceso, que el hecho de ser mujer, a pesar de nuestras quejas por desigualdad, en ocasiones es utilizado como herramienta a favor en temas tan complejos como estos, o como un divorcio.
Queremos igualdad, y yo como mujer denuncio estas situaciones lo mismo que haría en el caso adverso, basándome en que NUNCA hay que olvidar que estamos tratando con personas y vidas humanas que pueden ser destrozadas sin pena ni juicio, independientemente del género de los implicados.
Para finalizar, copiaré un trozo de un testimonio escrito por la madre, y desde aquí dar mi apoyo a cualquier persona que se encuentre en una situación parecida, o que esté sufriendo una situación de violencia de género.

Dedicado a todas las "ganadoras" de juicios basados en denuncias falsas, que sin aportar prueba alguna más que su viperina lengua, se han "salido con la suya.

A ti, que reiterando la mentira y la falacia y dándote de la mano a la difamación gratuita has conseguido engañar a los jueces. A tí que dejándote llevar por el odio, único sentimiento que llena tu ser, has pretendido arruinar la vida de quien te la dio y sin quien vivirías probablemente dado tu historial, en la calle, a tí, decirte que nada más lejos de la realidad. Eso has conseguido. Nada.
Por que la verdad existe y solo es una.
Y más allá de las injusticias judiciales de quienes se dejan llevar por la presión social, la demagogia y el miedo al qué dirán, hay personas honestas, responsables y conocedoras de la única verdad. Y a éstos, nadie los engaña. Ni las inconstitucionales y discriminatorias sentencias que tú enmarcas en tu salón como medallas a tu interpretación teatral.
Y la verdad es que las buenas personas están acompañadas, apoyadas, no tienen miedo, y van por el mundo con la cabeza alta, con dignidad y señorío.
Y las malas personas, malviven como parásitos enganchándose de víctima a víctima, para asegurarse así su supervivencia.
A ti... mi última palabra: Trabaja, que ya tienes edad. Y deja de vivir de los demás, de tus falacias, y de tus mentiras. Ten un poco de dignidad. Busca primero el término en el diccionario y aplícatelo”.

[B.E.A.T.R.I.Z]

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